
El presidente Javier Milei se prepara para un encuentro crucial con la general del ejército estadounidense Laura Richardson, líder del Comando Sur (SOUTHCOM). La reunión está programada para llevarse a cabo en Ushuaia, Tierra del Fuego.
El viaje hacia el sur del país fue iniciado por el jefe de Estado argentino poco después de las 18 horas, marcando así una clara señal de alianza política con Estados Unidos, en medio de la preocupación por la influencia creciente de China en América Latina. La delegación que acompaña al presidente está compuesta por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, y los ministros de Defensa, Luis Petri, y de Interior, Guillermo Francos, entre otros funcionarios.
El lugar elegido para este encuentro no es coincidencia, ya que coincide con los esfuerzos de China para establecer un puerto en Tierra del Fuego, lo que le otorgaría un control estratégico sobre el paso bioceánico y le permitiría establecer una presencia en las cercanías de la Antártida.
En palabras de la general Richardson: «La República Popular China está realizando un juego de largo alcance con el desarrollo de sus sitios de doble uso y facilidades a lo largo de la región». Esto incluye proyectos como puertos en aguas profundas que podrían tener implicaciones significativas para la región antártica y la actividad pesquera.
Durante su reciente encuentro con el secretario de Estado Antony Blinken, Milei reiteró su compromiso de impedir que China consolide su presencia en Argentina. Este viaje no solo reafirma la alianza estratégica con Estados Unidos, sino que también subraya la postura argentina respecto a la soberanía de las Islas Malvinas y áreas circundantes. En un momento en el que la preocupación por las acciones de China en la región es alta, el presidente Milei busca fortalecer la cooperación internacional para proteger los intereses argentinos.